El Torneo de Linares de este año quizá no esté siendo el más excitante de la historia, pero estamos viendo luchas tremendas y muy igualadas que, en muchas ocasiones, desembocan en interesantes finales de torres, como ocurrió en la partida Carlsen - Aronian, de la 8ª Ronda.
El final con peones f+g contra peón h es de tablas teóricas, pero el defensor se encuentra con bastantes dificultades prácticas, sobre todo si le queda poco tiempo, como le ocurre aquí a Carlsen (o a Lalic conmigo, en el final que analizamos el mes pasado). Tras otras 23 jugadas, los gladiadores llegaron a la siguiente posición:
¡Es duro defenderse durante horas y dejar escapar las tablas por un pequeño detalle de última hora! Por cierto, antes de caer en la tentación de criticar el juego del prodigio noruego recordad la cita de Short que os subí el otro día...
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